¿Has entablado amistad con alguna? ¿Cómo han influido en tu vida o estilo?
Muy pocas veces pedí permiso para sacar la foto con la certeza de que me iban a decir que sí y soltarles un piropo… que supieran que la fotografía la tomaba por lo estilosas que se veían.
Las hago sin que se den cuenta, al pasar, pero cuando están sentadas o atentas y siento que les puede resultar ofensivo ver como les roban una foto, ahí sí pregunto.
Lo que me gusta es que ellas suelen estar en movimiento. Me anticipé sin querer a los coolhunters, que ya no recuerdo cuándo ni cómo surgieron. Y a las cuentas de ancianos con estilo que hay por todo el mundo. Desde entonces me aburrió un poco más hacerlo, debo confesar.
También algo que me di cuenta cuando hice retratos para una revista es que a la gente mayor no le gusta mucho que le saquen fotos. Supongo que por una personalidad marcada y por desconfiar que las retratan como ellas quieren. También por distintas costumbres de épocas, pero a la gran mayoría no le gusta. Y las entiendo. Yo haría lo mismo.
¿Ves a los mismos personajes todo el tiempo?
Sí, muchísimos se repiten. Hay varias que ya tienen sus fanáticos; otras que lamentablemente no vi más y algunas que me alegro de volver a ver después de mucho tiempo.
¿Qué canciones escuchan las “Señoras Paquetas”?
¿Tangos? ¿Boleros? No estoy segura. Una que me hace acordar mucho a ellas y al humor que intento poner detrás, es Amarraditos de María Dolores Pradera que dice algo así: “Vamos amarraditos los dos, espumas y terciopelo. Yo con un recrujir de almidón y tú, serio y altanero. La gente nos mira con envidia por la calle, murmuran los vecinos, los amigos y el alcalde…”.