DETRÁS DEL LENTE
INVIERNO EN LA CIUDAD DE MÉXICO POR GERARDO SANDOVAL
Nacido en 1996 en Guadalajara, México, Gerardo Sandoval, conocido como Gess, estudió artes visuales y dirección de arte en la Nuova Accademia di Belle Arti en CDMX. Durante los últimos 10 años, Gess ha trabajado como fotógrafo, ayudando a construir y crear comunidades digitales en las redes sociales. Su perspectiva y visión únicas le han valido muchas publicaciones en América Latina y el mundo. Además, le ha dado la oportunidad de viajar y gestar innumerables campañas internacionales, estableciéndose como una presencia e influencia global y como uno de los rostros de la nueva generación de fotógrafos.
Su enfoque explora temas relacionados con el uso del diálogo poético y la narración alegórica. Con un ojo agudo para la luz, los detalles y el movimiento, captura imágenes cautivadoras en los géneros de fotografía de estilo de vida, paisaje, documental y arquitectura.
En la actualidad, reside en la Ciudad de México, haciendo dirección creativa para Anfora y trabajando constantemente en encargos de fotografía para Apple.
Instagram: @gess8
Cuéntanos de tu relación con la Ciudad de México.
Desde muy pequeño soñaba con vivir en CDMX. Crecí mudándome de poblaciones alrededor de mi país, en un constante cambio y caos, pero siempre me sentí identificado con la Ciudad de México. La inmensidad de esta urbe me ha dado la oportunidad de vivir muchas realidades, de crear mi hogar y de tener la libertad de descubrir mi propio lenguaje para comunicarme con el mundo.
Háblanos de esta serie: ¿Por qué el invierno? ¿Cómo se diferencia el invierno en México comparado con otros que hayas experimentado?
Soy una persona que vive en conciencia constante de la naturaleza y su movimiento. Pese a que la ciudad está llena de edificios y concreto, el clima, la calidez, la luz, la iluminación de la temporada, hacen que puedas percatarte de los detalles que mueven a esta jungla de concreto y que todo se vea más romántico y nostálgico al mismo tiempo.
¿A qué huele CDMX en el invierno?
El invierno en la ciudad es muy fresco, así que los olores varían mucho dependiendo la hora o la ubicación, desde comida rica y calentita, hasta el humo sucio y apestoso de los coches y el tráfico.
¿A qué sabe?
A días en home office con churros y chocolate caliente o café.
Si tuvieras que escoger ese “algo” preferido de CDMX, ¿qué sería?
La jungla en la ciudad. Me encanta que las calles están llenas de plantas, árboles y restaurantes y negocios al aire libre, así como la gran cantidad de parques y áreas verdes por todas partes que te dan la posibilidad de recorrer la ciudad caminando.
¿Qué podría sorprender a un extranjero sobre el invierno en México?
Probablemente, el ritmo y la inmensidad, pues en lo personal es mi temporada favorita de actividades y cosas por hacer; hay muchas festividades, ferias, festivales y nuevos comienzos. El clima se siente muy templado a comparación de otros países y el ambiente se percibe mucho más relajado que el resto del año, aunque lleno de vida para conocer museos, galerías y restaurantes. En mi experiencia, la mayoría de personas expresa alguna idea o deseo de vivir una temporada en esta ciudad después de que la experimenta.
Para ti, ¿cómo sería un día perfecto en CDMX?
Un día lleno de comida. Honestamente, desde que resido aquí, he probado los mejores platillos, que me han colmado de recuerdos y experiencias que no sabía que se podían vivir a través de mi paladar. Así que un día perfecto sería caminar y recorrer mis cafés y restaurantes favoritos de la ciudad mientras hago fotos de los descubrimientos en el trayecto.
Compártenos un secreto local.
Los tianguis, los mercados y la street food son la mejor manera de conocer la ciudad y a las personas que la hacen.
Dicen que uno nunca termina de descubrir cosas nuevas en CDMX. ¿Has encontrado algo interesante recientemente?
Eso es justo parte de lo que tanto disfruto de esta ciudad… todo el tiempo están pasando cosas que te llevan a descubrir nuevas experiencias. Recientemente, hallé la fuente de sodas del bosque de Chapultepec, frente a uno de sus lagos y a un lado de una librería. Lugar perfecto para pasar una mañana con café y una buena lectura.
¿Algo que todos deberían saber antes de llegar a este destino?
Español.
¿Qué es lo más especial de la ciudad?
El ambiente, la vibra, la empatía y la comunicación, pues a pesar de que es una ciudad tan inmensa, y con un ritmo que puede llegar a ser algo acelerado, las conexiones y comunidades que conoces o creas todos los días son mucho más grandes que la misma ciudad.
¿Alguna palabra o slang local?
Creo que “aguas” o “me late”. Son las que más uso.
En búsqueda de cultura local, ¿a dónde vas?
Al centro histórico. Visitar esta parte de CDMX es como viajar a un pasado surrealista en donde la historia y la cultura de la ciudad se cuentan por sí solas en las calles.
Tienes solo 48 horas en la ciudad, ¿qué no puede faltar en el itinerario?
Lo primero que se me viene a la mente es el centro histórico. Conocer Bellas Artes, el Zócalo, los museos y comercios a su alrededor. Pasar por el bosque de Chapultepec y el museo Tamayo o el de Antropología. Y si da tiempo, por el castillo de Chapultepec para observar la vista desde sus balcones. Después, terminar en el sur de la ciudad, en Coyoacán, la UNAM o hasta en un recorrido en una trajinera en Xochimilco.
¿Un plato que todos deberían probar?
Los chilaquiles o las quesadillas con queso y un rico chocolate.
¿El mejor plato que has comido en tu vida en la ciudad?
Creo que la lista de comida deliciosa en esta ciudad es muy larga para pensar en algo puntual, pero un plato de tacos campechanos de los Cocuyos en el centro histórico me llena de felicidad.
¿Restaurante que no falla?
Hugo wine bar o Galanga Thai house.
¿Un lugar que siempre te sirve de inspiración?
El Paseo de la Reforma.
¿Barrio favorito?
La Juárez, pues es el corazón de la ciudad.
Mejor ‘locals only’ drinks?
El carajillo con mezcal de Café de Nadie. Es Perfecto.
¿Qué es la belleza para ti?
Cualquier cosa que pueda conservar y mostrar su autenticidad.
¿Algo más que te gustaría agregar?
Esta ciudad es una experiencia surreal y para poder disfrutarla es necesario estar abierto al cambio y la constante ironía de la CDMX.
