CAFECITO CON
DANI G. SHULZ: “VIVIR EN EL PRESENTE ES MI SUPERPODER”
Nombre: Daniela G. Schulz
Profesión: Periodista y emprendedora
Nacionalidad: Ecuatoriana
Signo zodiacal: Cáncer
Instagram: @danigschulz
LATINNESS: Empecemos por el principio. ¿Dónde creciste?
DANI: Nací en Venezuela. Mi mamá es chilena y mi papá, español. Se mudaron en la época en la que el país pasaba por un booming. Muchos europeos también fueron a parar allá, al igual que gente de Chile y Argentina, que estaba supermal en aquel entonces.
Ellos se conocieron en Venezuela y luego nací. Me quedé hasta los siete años. Después me trasladé a Ecuador y ahora vivo acá. Sin embargo, permanecí unos once años por fuera porque me radiqué en Estados Unidos. Además, estuve un tiempo en Madrid y en Panamá.
Esto hace que sienta que tengo una crisis de identidad heavy. Aun así, trato de pensar que guardo una parte de todo y eso es lo que me vuelve quien soy.
LATINNESS: Una verdadera latinoamericana. Cuando te preguntan de dónde eres, ¿qué dices?
DANI: No cuento toda la historia, porque no creo que eso a la gente le interese. Pero sí hablo de Ecuador, pues viví acá desde los siete años; mis papás siguen aquí, al igual que mis hermanas. Además, todas mis amigas de la infancia están en este país. Sin embargo, tampoco me siento muy ecuatoriana; soy diferente a las personas que me rodean, pero decir que lo soy es lo más fácil.
LATINNESS: Cuando comenzaste tu carrera en Panamá, no era necesariamente una ciudad que lanzara creativos. ¿Cómo sientes que este país influyó en tu proceso?
DANI: Mucho. De hecho en mi caso fue diferente, porque Panamá cambió todo para mí.
Antes estaba en Madrid y era periodista deportiva. Entonces, me especialicé en fútbol europeo y saqué mi máster en esta área del periodismo.
Cuando llegué a Panamá, me di cuenta de que el fútbol wasn’t a thing. Es decir, arribé justo el año en que el equipo del país entró por primera vez al Mundial, así que trabajé un par de meses en un canal de televisión de deportes, que se llama Cable Onda Sports en Ciudad de Panamá. Rápidamente me di cuenta de que había un techo, que ya no podría crecer más.
Panamá fue super transformador, porque me hizo buscar cosas fuera de lo que siempre pensé que iba a hacer con mi vida. Y de ahí salieron las redes sociales. Fue un lugar en el que tuve que ponerme muy creativa y preguntarme qué camino quería tomar.
Y es que luego del tiempo que pasé estudiando deportes y el máster, y después trabajando en un periódico deportivo en Madrid, muy bueno, dije: “ok, all of that is out the window, porque aquí simplemente no se va a dar y ahora estoy acá”.
Por eso comencé con las redes sociales, de hecho respondería a tu pregunta diciendo todo lo contrario: para mí fue un lugar muy creativo.
LATINNESS: Y ahora que estás en Ecuador, ¿cómo sientes que le aporta a tu trayectoria?
DANI: Regresar a Ecuador fue superimportante para mí, porque llegó el momento de plantar raíces de nuevo. Durante once años me enfoqué mucho en mis alas, por así decirlo. Me mudaba con frecuencia y estaba experimentando diferentes cosas. Viví lejos de mi familia por largo tiempo.
Este regreso me permitió reconectar con personas de mi vida con quienes quizás no había logrado un vínculo muy fuerte. Tener a mis papás cerca como apoyo y a mis amigas de toda la vida ha sido muy lindo, pues creo que hoy día vivo una existencia muy movida; estoy viajando casi todos los meses.
Volver a Ecuador me dio calma y tranquilidad. Tengo mi casa y mi perro, y mi familia vive cerca.
En términos de creatividad, por lo general la gente piensa en cómo se puede expandir y a dónde moverse para lograrlo. Pero a veces se olvida que las raíces son importantes, así como regresar al lugar de donde vienes y conectar con esas personas que fueron trascendentales en años tempranos de tu vida. Esto me ha ayudado también con mi creatividad, solo con sentir un espacio muy seguro para seguir creciendo.
LATINNESS: Has atravesado momentos de vulnerabilidad en los últimos años: mudanza, divorcio… ¿Cómo te ha fortalecido y ha contribuido a tu éxito y esta búsqueda de la creatividad?
DANI: Con el tiempo me he dado cuenta de que mi autenticidad y vivir en el presente es mi superpoder. De hecho, mi comunidad comenzó a crecer justo cuando estaba pasando por un divorcio. Al principio, lo escondí, simplemente por temas legales. No podía hablar de eso. Pero una vez superado, empecé a abrirme.
Entendí que tenía muchas creencias limitantes acerca del tema. Que si me mostraba vulnerable, la gente me iba a tomar menos en serio. Y eso para mí es importante, porque mi seriedad sí influye un montón en mis ventas y en qué tanto las personas están dispuestas a pagar por mis servicios, mis cursos, etcétera.
También creía que a las mujeres casadas se les prestaba mayor atención que a las divorciadas; por eso escondí mi situación por largo tiempo. Se nos olvida que la gente nos puede sorprender y mucho.
Así que hice un video de YouTube en el que hablé acerca de mi divorcio y de mi decisión de mudarme de vuelta a Ecuador. ¡La respuesta fue tan bonita! Y quienes mejor reaccionaron fueron las mujeres que habían pasado por eso, o que lo estaban considerando y no sabían cómo dar el primer paso.
Siento que logré una conexión mucho más profunda con mis seguidores después de eso. Ahora es algo que va mucho más allá de la superficie, en especial hoy día con el pódcast, en el que hablamos de temas como la vergüenza, la comparación y el síndrome del impostor. Todas las cosas que he sentido, trato de comunicarlas de una manera en la que muestro que no soy inmune, pero tengo herramientas para trabajar.
Esto ha creado una conexión muy poderosa con la gente que me sigue y me ha permitido trascender el perfil cool de una chica que se viste bien.
LATINNESS: Tu pódcast Viene y Va con Dani G. Schulz ha tenido mucho éxito. ¿Qué te impulsó a crearlo?
DANI: Soy periodista de profesión y trabajé mucho en locución y copywriting. Más que nada, quería una plataforma que no tuviera que ver conmigo.
Hubo un momento en que sentí que todo lo que tenía se relacionaba con la manera en que me veía y me presentaba. El pódcast es una plataforma en la que la gente no me ve; simplemente, me escucha, a mí, a mis pensamientos, a mi aprendizaje.
Ha sido superpoderoso darme cuenta de que sí hay personas a quienes les interesa lo que digo y que no se trata de mi físico, ni de la ropa que me pongo, ni de lo que tengo. Solo mi cerebro y lo que este quiere comunicar.
Fue muy sanador entender que están ahí no solo porque me veo de cierta manera o porque caigo en un estereotipo impuesto por la sociedad, sino también por mi voz y por lo que esta expresa.
Por otro lado, me he sentido extranjera en muchos lugares y momentos de mi vida. El pódcast nació además de este deseo de querer acompañar a personas que quizás se sienten solas y tratar temas que a veces ni siquiera nos atrevemos a tocar con nuestros amigos, como body image, depresión y síndrome del impostor.
Quería un espacio en el que no importa quién eres ni cómo te veas. Aquí vamos a hablar de estas cosas y todo es válido. Es válido que te sientas magnífica, regia y poderosa. También que te compares y que dudes. Ambas cosas coexisten. Hay que normalizarlo y hablar de ello para que se convierta en un lugar seguro.
LATINNESS: Con respecto a ser extranjera, hemos hablado con otros latinos que han encontrado conexión con su cultura a través de la creatividad. ¿Qué te hace sentir en casa?
DANI: Justamente, las raíces que mencioné antes. Los que somos latinoamericanos lo sentimos en la sangre y en el corazón. Hay una cosa que nos une y que es inexplicable e intangible. Esto lo percibí cuando fui a college en Estados Unidos. Solo encontrarme con otros latinoamericanos, me permitió entender que hemos sido criados de maneras muy parecidas y tenemos valores similares.
Lo que me ha mantenido cercana a mis raíces mientras soy extranjera en otro lugar, también ha sido escuchar pódcasts, encontrar lugares de arepas o donde me sirvan un buen Cuba Libre o tequeños en la ciudad en la que estoy, toparme con otros latinos, escuchar la música que oía de pequeña.
Creo que a todo lugar al que vayas siempre habrá latinoamericanos o extranjeros. En este caso, lo mejor será que trates de encontrar esa comunidad y te permitas disfrutar los placeres simples de la vida que te reconectan a tu latinness.
LATINNESS: Hablando de cuando eras pequeña, ¿qué soñabas ser al crecer?
DANI: Siempre quise salir en la televisión, como mi mamá. De hecho, ella me lo inculcó un montón.
Fui la típica niña que en la cena familiar se paraba a bailar, a cantar o a decir algo. Me gustaba ser el centro de atención, aunque eso me hacía sentir culpa.
De adolescente oía esa vocecita que te dice: “no llames mucho la atención”, “no trates de siempre ser el centro de atención”. Pero creo que hay personas a las que esto se les da de manera muy natural. Eso no es malo; muchas veces quieres atención porque tienes cosas importantes que decir y sabes que puedes compartir algo que va a ayudar a un montón de personas.
Mi mamá siempre me insistió: “eres muy buena comunicando; estudia periodismo”. Todo el tiempo me lo decía; era full stage mom. Hoy se lo agradezco muchísimo porque ya lo puedo contar sin pena.
El otro día, una amiga me estaba preguntando en su pódcast: “¿Cómo has crecido tan rápido? ¿Cómo ha sido para tu psiquis y para tu sistema nervioso conseguirlo en tan poco tiempo?”. Y le respondí: “En verdad, siento que fui hecha para esto y es gracias a mi mamá. Ella siempre me inculcó: ‘tienes algo valioso que decir; tienes algo para compartir. ¡Compártelo!’”. Mucha gente me criticó porque dije eso en el pódcast, pero no decirlo sería, simplemente, falsa humildad. Creo que negar esas partes de ti que se te dan tan naturalmente es falsa humildad, esa que nos meten a las mujeres, especialmente en Latinoamérica. Un “mantente chiquita”, “no tomes mucho espacio”, “no alces demasiado la voz”.
Hay que cambiar esa manera de pensar, especialmente con las mujeres. Considero que hay que alimentar esas ganas de decir algo importante, de ser alguien importante. Que creas que puedes ser la próxima presidenta o la próxima política. No debemos sentir vergüenza de querer serlo. Siento que con las niñas a veces pasa, o al menos ocurría cuando era chiquita.
LATINNESS: Tu crecimiento en redes sociales ha sido exponencial. Hace tres años pasaste de diez mil seguidores a más de trescientos mil hoy día. ¿Cuál es el secreto?
DANI: Métete a uno de mis cursos (risas). Mi secreto no es algo tan secreto, porque no creo que exista una fórmula misteriosa… La debes crear tú.
Lo primero es que tienes que dejar de pensar tanto en tus debilidades. Y esto lo trabajo mucho con mis alumnos: no creas que eres mala hablando en cámara o comunicándote, no te enfoques en eso. Encáuzate en lo que eres buena. ¿Qué tal si eres superbuena diseñando cosas? ¿Qué tal si eres superbuena generando conceptos? Tienes que encontrar en lo que eres buena.
Ahora bien, no siempre vas a querer hacer aquello en lo que eres bueno. Digamos que es un venn diagram y tenemos tres círculos. En uno está lo que te apasiona; en otro, lo que te gusta, y en el tercero, lo que te va a hacer ganar dinero. En el lugar en el que estos tres círculos se encuentran es donde está el rayito, como lo llamo; eso a lo que realmente te quieres dedicar en redes sociales.
Se trata de encontrar las cosas que se te dan con facilidad, lo que te gusta hacer y luego lo que puedes monetizar. Y es que para crecer en redes sociales ya no basta con tener una foto linda ni vestirte cool. Tienes que decir algo importante que ayude a la gente o que le enseñe de alguna manera.
Yo, además, me he metido en plataformas que dan visibilidad e Instagram ya no es una de ellas, porque solo te ven las personas que te siguen. Con esto me refiero, por ejemplo, a Pinterest, YouTube y TikTok, en donde si haces contenido y a este le va bien, el algoritmo se lo va a mostrar a otras personas. Yo comenzaría por ahí; o sea, me abriría una cuenta de TikTok ya y otra en YouTube ya.
LATINNESS: Hay mucho ruido hoy en día en redes sociales. ¿Qué te diferencia?
DANI: Creo que es que me tomo tiempo para reconectar conmigo misma. No soy una creadora que esté constantemente viendo lo que hacen otros creadores. No soy una creadora que esté constantemente consumiendo redes sociales, porque eso lo hacen muchos creadores: meterse en TikTok y ver What’s Trending? ¿Cómo me puedo meter al trend? ¿Cómo puedo hacer que más gente me vea?
Considero que mi crecimiento ha venido de que yo me tomo mi tiempo para conectar de vuelta con mi poder interior, con mi yo interior. Todas estas herramientas que utilizo, como journaling y meditación, manifestación, ejercicios de visualización, es realmente lo que me deja crear buen contenido y tener confianza en mí misma.
Y es que el buen contenido no viene de solo seguir trends y hacer lo que a otros les funcionó, porque eso ya está hecho. La única manera de innovar y de crear cosas nuevas es reconectar contigo mismo y darte la oportunidad de inspirarte.
Tengo la suerte de que mi trabajo me deja viajar un montón y gracias a eso me inspiro y genero nuevos conceptos. Te diría que si estás tratando de stand out, no pases mucho tiempo consumiendo redes sociales, porque vas a hacer lo mismo que todo el mundo.
En verdad, el contenido viene de ti, de qué tan honesto eres contigo, de qué cosas quieres comunicar y cómo estás utilizando herramientas que están literalmente en tus manos para poder sobresalir por encima de todo el ruido que hay.
LATINNESS: Siendo una persona tan expuesta, ¿cómo cuidas tu salud mental?
DANI: Un psicólogo. Lo recomiendo full. Lo veo una vez a la semana. También me mantengo activa y eso me ha ayudado a transformarme con el paso de los años. Me refiero a salir a caminar escuchando un pódcast o una canción que me gusta, jugar con mi perro, meditar y hacer journaling todos los días. Esto me cambió la vida.
Sí, ahí sí hay la trifecta: psicólogo, si te es posible, porque sé que no está disponible para todo el mundo; journaling, y caminar sin ruido y sin que estés viendo tu celular, solo escuchando algo que te gusta.
LATINNESS: Eres un modelo a seguir para muchas personas jóvenes. ¿Qué responsabilidad sientes? ¿Les darías algún consejo a las personas que nos leen o que te siguen?
DANI: Realmente sí siento esa responsabilidad, en especial porque me siguen chicas muy jóvenes. Me siguen menores de edad, así que siempre trato de hablar desde la honestidad. Y es que si eres joven y me estás escuchando, puede que tengas esta imagen de mí muy idolized.
LATINNESS: La gente tiende a idolatrar un poquito…
DANI Exacto. Por eso siempre tengo presente hablar de cuando las cosas no salieron bien y de los errores que cometí; ser honesta acerca de los momentos en que me fallé a mí misma o a un amigo o a un familiar.
Muchas de esas cosas las cuento en el pódcast para que las personas no sientan que soy un modelo perfecto, porque no lo soy. Soy humana y me equivoco, y lo seguiré haciendo. La honestidad ha sido algo superimportante.
Ahora bien, como siempre que hay personas menores de 18 años que se meten en mis cursos, hablo antes con los papás para ponerlos al tanto sobre el interés de sus hijos en lo que dicto.
Me pasa en mi vida social también, por ejemplo, que voy a bodas y se me acercan mamás y me dicen: “Mi hija tiene 13 años, ama tu pódcast y todo el contenido que subes”. Siempre les hago la misma pregunta: “¿Siendo mamá te da tranquilidad que me siga?”. Todas me han dicho sí. Eso me da mucha confianza.
LATINNESS: ¿Conociendo a tu comunidad, mantienes tu contenido PG-13?
DANI: Sí, totalmente. En el pódcast, en donde hablo quizás de temas un poco más adultos, como sexo o salud mental, siempre doy antes un disclaimer. Esto ocurre principalmente cuando trato temas sobre mental health.
También doy ese trigger warning a personas que puedan tener cosas muy a flor de piel y quizás no estén listas para escuchar lo que tengo que decir en el pódcast. Así que sí, siento una responsabilidad enorme y creo que así cuentes con un seguidor o cientos de miles, es algo que tienes que tener presente.
No puedes ser irresponsable en las redes sociales, porque no sabes a qué oídos va a caer y cómo afecta la vida de esa persona.
LATINNESS: Claro, tener una influencia positiva.
DANI: Creo que la manera de hacer eso, es la honestidad. Que te bajes de ese pedestal en el que quizás la gente te tiene, porque no estás ahí. ¿Cuál es la diferencia entre una persona que me escucha y yo? Que tengo seguidores y una plataforma, pero eso no me hace ni más ni menos.
Ser honesta y admitir cuando has errado y las cosas no te han salido bien, es superimportante para que la gente se quite la mentalidad de que esa persona es perfecta. Nadie lo es.
LATINNESS: Hay muchas opiniones sobre los influencers hoy en día. ¿Qué le dirías a alguien que no lo toma en serio?
DANI: Bueno, le diría que ser influencer no es una carrera. Solo se trata de alguien que tiene influencia sobre un grupo. Te sorprendería cuántas personas se denominan influencers y realmente no cuentan con esa influencia.
A alguien que no cree en esta carrera le respondería: tienes razón. Considero que la única manera de tomarse en serio esta carrera es cuando estás pensando tres, cinco o diez años más adelante, porque esto no sabemos hasta cuándo va a durar. Entonces, ¿cómo podemos asegurar nuestro futuro? Y, ¿cómo podemos asegurar que seguiremos siendo relevantes?
La manera de lograr esto es brindar herramientas a otras personas, ya sea para mejorar su vida o para que aprendan algo nuevo. Los influencers que están marcando la diferencia son los que van más allá de esa foto bonita o de venderte una camisa.
LATINNESS: ¿Y cómo ves a Dani Schulz en diez años?
DANI: Me encanta pensar en el futuro. Me imagino trabajando mucho menos, porque ahora estoy riding the waves y tratando de sacarle el jugo a lo que hay en el momento. Tengo muchísima suerte con lo que me está pasando. También me proyecto aportando más a la comunidad de diferentes maneras que no necesariamente están enfocadas en social media.
Sueño con muchos perros y haciendo lo que me apasiona, y pienso que eso se va transformando con los años. Solo espero que en una década, cuando me sienta y me pregunte: “¿Estoy haciendo algo que me apasiona y que realmente sea importante?”, la respuesta sea “sí”.
Ahora lo es, pero no sé si lo que esté haciendo en diez años me va a motivar y a apasionar tanto como hoy. Quiero seguir siendo una comunicadora y espero contar con una plataforma para compartir mis pensamientos y, más que nada, mis aprendizajes.
Imágenes por Daniel Cornejo, cortesía de Dani G. Schulz.
